Los hechos ocurrieron a las ocho de la mañana el pasado lunes 29 de julio en una estación de tren de Frankfurt, Alemania; un hombre de 40 años de edad empujó a un niño de 8 años con su madre desde el andén del tren en el que estaban a las vías. Según testigos el hombre empujó a ambos intencionalmente, se dice que intentó tirar a una tercera persona, pero al estar advertida por lo que acababa de pasar, se resistió y el hombre no logro tirarla. Después de lo ocurrido, el hombre intentó darse a la fuga, pero fue detenido por dos policías de la zona con ayuda de varios civiles que se encontraban en la estación el tren.

La madre del niño logro ponerse a salvo, pero el niño no tuvo la misma suerte; el pequeño fue arrollado por el ICE (tren de alta velocidad). “Recibimos de inmediato la atención de 16 ambulancias y un helicóptero, pero fue imposible reanimar al niño”, declaro el director de la estación Carsten Baumann. La madre del niño fue trasladada inmediatamente al hospital más cercano, pero hasta el momento se desconoce el estado en el que se encuentra.

“Prometo a la familia y a todos los ciudadanos que no vamos a parar hasta aclarar hasta el fondo estos hechos tan horribles, no puedo imaginar algo peor que arrojar violentamente a las vías del tren a una madre y a su hijo y hemos de dar tiempo a las autoridades policiales a que hagan su trabajo” mencionó el presidente de Hesse, Volker Bouffier.

Hasta el momento se desconocen la identidad y los motivos por los que el criminal cometió el este acto, por lo que las autoridades confirmaron que se inicio una investigación por asesinato.

“Todavía no están claros los antecedentes del criminal” mencionó el ministro Seehofer, quien ha justificado la interrupción de sus vacaciones aludiendo a demasiados delitos graves ocurridos recientemente.